martes, enero 12, 2010

La corta memoria


Para L, V, L y D.

Este fin de año le eché una mirada a Roger & Me (EU, 1989), el documental que Michael Moore realizó con respecto de los despidos masivos que General Motors llevó a cabo a finales de la década de los ochentas en ciudades cuya economía giraba en torno de las armadoras de la trasnacional. Una de las ciudades más afectadas fue, precisamente, Flint, Michigan, la ciudad natal de Moore. El documental narra con desparpajo el periplo que el cineasta se impone al intentar conseguir una entrevista con Roger Smith, el encargado de las decisiones importantes de GM.
          Resultó imposible no asociar el drama reflejado en la cinta con la situación que en México vivieron los integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas a partir de la extinción de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro. Situaciones en las que se puede ver que los llamados “privilegios” no son sino la posibilidad de acceder a mejores condiciones de trabajo. La desaparición de la ciudad de Flint en el país más rico del mundo no puede compararse con la transformación radical que están sufriendo poblaciones como Necaxa, en Puebla, donde la economía local giraba alrededor de los ingresos y “privilegios” de los electricistas sindicalizados.
          En la cinta de Moore es imposible no sentir afinidad con los trabajadores que ven perdida su fuente de trabajo en unos cuantos días, que son expulsados de sus viviendas al no poder pagar la renta, que son orillados a trabajar en condiciones deplorables con respecto a su situación precedente. Las plantas se mudaron a lugares en los cuales los trabajadores no ponían tanto reparo en ser pisoteados y en donde los gastos para el capital trasnacional eran muy inferiores. Países como México, por ejemplo, en donde la entrada de estas empresas se hizo posible, deseable y limosneable a partir de las reformas que Carlos Salinas hizo a la Ley Federal del Trabajo como requisito indispensable para la negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte que entró en vigor en 1994.
           Los trabajadores terminan abandonando sus antiguas viviendas, criando y vendiendo conejos (“Como mascota o como alimento”, según reza alguna publicidad improvisada de una sobreviviente entrevistada), asilándose en la precaria asistencia social, buscándose la vida con perspectivas inciertas. La andanada mediática en el caso GM es muy similar a la que fue dirigida contra las miles de familias que quedaron con perspectivas inciertas en un país en donde su situación “privilegiada” como trabajadores pudo haber sido el común denominador y no la indignación construida por los derechos de que gozaban. O sea, nos indignaba que trabajadores obreros tuvieran derechos que al resto de los ciudadanos nos están negados por incapacidad de organización y porque hemos aceptado sin más la lógica del mercado.
           Ante el aumento de precios y el coste de la vida que se perfila en crecimiento conforme avance el año, sólo dejo dos reflexiones:
• Acaso no, de acuerdo a los spots mediáticos transmitidos a granel y con singular generosidad por el gobierno federal, la extinción de la Compañía de Luz resolvía los problemas de liquidez de los programas sociales. Éstos serán, según declaraciones de los funcionarios, los destinatarios de los ingresos que se obtengan por los aumentos a la gasolina. ¿O sea que cuánto se van a gastar, perdón?
• ¿Por qué gran parte de la ciudadanía, la que aplaudió el despido masivo y el desmantelamiento de la paraestatal, no ha dicho ni pío con respecto al alza indiscriminada, a pesar de que afecta de manera directísima?
Hace falta un Michael Moore en México que pueda documentar tanta contradicción, tan corta memoria. Y lo requerimos con sentido del humor, que es uno de los valores más evidentes en el norteamericano. En fin.

2 comentarios:

Victor Jurado Acevedo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Victor Jurado Acevedo dijo...

Te estas desvelando y es malo tu sueño es importante.

Esta interesante entrada esta. publicada muy noche

Por fabor donde estan tus nuevos habitos de sueño deportista...