martes, junio 05, 2012

No se olvida


El 5 de junio de 2009, en Hermosillo, Sonora, durante un incendio en una guardería subrogada al Instituto Mexicano del Seguro Social murieron 49 niños y 76 resultaron heridos con quemaduras de diversos grados. La guardería se llamaba ABC. De los 19 funcionarios involucrados en el crimen, sólo a uno se le está siguiendo proceso. Los demás no sólo se encuentran en libertad sino que algunos, incluso, se encuentran en la búsqueda de puestos políticos dentro de la actual contienda electoral.
         Entre los responsables se cuenta a familiares del actual presidente de la república, Felipe Calderón, que más allá de apoyar la presentación ante la justicia de los responsables, se limitó a declarar como día de luto nacional el 5 de junio.
         Este es uno de los casos más aberrantes de corrupción e impunidad que se han vivido en nuestro país. Corrupción en el origen de otorgamiento de la concesión del permiso para operar a una guardería que no contaba con las medidas de seguridad necesarias y que, por el tráfico de influencias de los funcionarios involucrados, terminó funcionando y convirtiéndose en una trampa mortal. Impunidad porque, a pesar de que un buen número de funcionarios públicos (algunos elegidos por medio de las urnas) tienen responsabilidad penal en el caso, ni siquiera han sido llamados a cuentas por la justicia mexicana.
         Los padres de estos niños, los muertos, y de los otros, los quemados y en proceso de rehabilitación, no han cejado en su lucha y continúan exigiendo lo que parece imposible: que el Estado mexicano establezca las responsabilidades y sanciones justas a los involucrados en el crimen. Estos padres son ciudadanos de a pie, trabajadores, madres solteras que han tenido que enfrentarse a amenazas, a descalificaciones, a la desesperanza de aquellos que les dicen que no conseguirán la justicia que buscan. En días recientes incluso fueron encarcelados por hacer una pinta en la que se exigía justicia por la muerte de sus hijos.
Sin embargo, a tres años de la tragedia, los padres continúan en su lucha. En la búsqueda de que los responsables paguen su deuda, una deuda que es con toda la sociedad mexicana, no sólo con esos padres que, a pesar de las adversidades, continúan en el camino.
5 de junio: ni perdón, ni olvido.

[A modo de recordatorio y homenaje, los nombres de los niños muertos:
Ana Acosta Jiménez, Andrés García Duarte, Andrea Nicole Figueroa, Aquiles Hernández, Ariadna Aragón, Axel Angulo Cazares, Bryan Méndez García, Camila Fuentes Cervera, Carlos Santos Martínez, Dafne Blanco Losoya, Daher Omar Valenzuela, Daniel Goyzueta, Daniel Rafael Navarro, Daniela Reyes Carreta, Denisse Figueroa Ortíz, Emilia Fraijo Navarro, Emily Cevallos Badilla, Fátima Moreno Escalante, Germán León Vázquez, Ian Issac Martínez Valle, Javier Merancio Valdez, Jesús Antonio Chambert López, Jesús Julián Valdez Rivera, Jonatan De Los Reyes, María Francisca Pérez Zazueta, Jorge Carrillo González, Juan Fernández Lara, Juan Rascon Holguin, Juan Rodríguez Othón, Julio César Márquez Báez, Lucía Carrillo Campos, Luis Denzel Durazo López, María Millan García, María Miranda Huges, Marian Hugues Mendoza, Martín De La Cruz, Monzerrat Granados, Nayeli González Daniel, Pauleth Coronado Padilla, Ruth Madrid Pacheco, Santiago Corona, Santiago De Jesús Zavala, Sofía Robles Martínez, Valeria Muñoz Ramos, Ximena Álvarez Cota, Ximena Yanez Madrid, Xiunelth Rodríguez García, Yazmín Pamela Tapia Ruíz, Yeceli Nahomy Bacelis Meza, Yoselín Tamayo Trujillo].

2 comentarios:

El Corsario Negro dijo...

Gracias por recordarlos, gracias por recordárnoslos.

No olvidemos, no perdonemos.

Anónimo dijo...

Hola tu blog está muy padre. Te felicito. Ojalá siempre sigas compartiendo cosas.

Saludos.