lunes, febrero 27, 2012

Día seis: un libro de un Premio Nobel

Cien años de soledad de Gabriel García Márquez
Suena a lugar común. A recurso de lector falto de referentes. Pero no. Creo que la decisión de hacer un posgrado en estudios latinoamericanos estuvo influido por la lectura de textos que hicieron que esa idea de una Patria Grande (idealismo, esencia y chovinismo desterrados) fuera una cuestión que se reflejaba más allá de la pura retórica. Y en esta obra de García Márquez quedan patentes algunas de las cuestiones asociadas a la historia compartida de América Latina.
         Por ahí pasa la explotación que la United Fruit ejerció en las bananeras durante gran parte del siglo XX, la descripción de la supuesta “vocación autoritaria” que hace que nuestros países rueguen porque los milicos lleguen “a poner orden” donde siempre ha habido caos (incluso cuando han gobernado los que se suponen iban a ordenar), la idea de la exuberancia vegetal-animal-erótica propia de la crónica de Indias y que García Márquez, no queda claro hasta qué punto de manera consciente, convierte en referente ineludible. Y también, de manera dolorosa, está la falta de memoria que nos orilla a cometer siempre los mismos errores.
         Que después poner a volar mujeres y hacer que la caca se convirtiera en mariposas amarillas se convirtiera en una moda, creo está más allá de la misma obra. Que se generó una pléyade de imitadores del “realismo mágico” que hizo que las descalificaciones tocaran incluso a esta novela, es otra historia. Yo me quedo con las imágenes, luminosas-nuevas-por-completo que se despertaron en mí la primera vez que lo leí. Lo demás será, ya verán, lo de menos.

Gabriel García Márquez, Cien años de soledad, México, Diana, 1992.

2 comentarios:

El Corsario Negro dijo...

Candidata a mejor novela de la historia, ciertamente no es una elección muy original, pero es una elección muy solida.

Anónimo dijo...

No es un lugar común citar una obra mítica de la literatura latinoamericana y más si hacemos eco de las palabras de Charles de Gaulle al terminar de leer la novela: esa obra me ha hechizado. Pero considero que con el paso de los años será eso: una obra mítica y nada más. Con el libro que me quedó de García Márquez es con El amor en los tiempos del cólera, lo siento más cercano a nosotros, más de todos los días. Pienso que ese será el libro por el cuál se recordará a García Márquez en el porvenir.