lunes, junio 23, 2008

Pequeños placeres


Película sordomuda, de Charly

El café.
Caminar.
Cerrar los ojos y echar la cabeza hacia atrás nomás porque sí.
Leer algo nunca leído.
Leer otra vez y descubrir algo que parece siempre nuevo.
El dolor después de hacer ejercicio.
Tronarme los huesitos de los dedos.
Pasar la mano por el pelaje de mi gato.
Escuchar una canción consentida (y repeat... y repeat... y repeat...)
Dormir cansado.
Despertar descansado.
El olor a suavizante de la ropa.
El helado de cereza y piñón.
Manejar en la madrugada sin tráfico.
La lluvia detrás de la ventana.
Un baño caliente.
Brincar en la cama.
Encontrar en la tele algo que no sea ruido blanco de colores.
Descubrir que uno es más de lo que uno cree.
Saber que los demás son más de lo que uno cree.
Tomar la primera cerveza.
Olvidar cuántas cervezas van.
Dejar bailar al cuerpo, sin reglas, decir "me poseyó el ritmo".
Tener la respuesta antes que todos.
Que sea la respuesta correcta.
Poner el punto final de algo. Cualquier cosa. Así.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo agregaría dormir abrazada, una rebana de pastel de chocolate de italianis, el olor a tierra mojada, enterrar los pies en la arena de la playa, y cambiaría tu helado por uno de cereza y nuez de santa clara, mmmm, delicioso.

Anónimo dijo...

Yo agregaría dormir abrazada, una rebana de pastel de chocolate de italianis, el olor a tierra mojada, enterrar los pies en la arena de la playa, y cambiaría tu helado por uno de cereza y nuez de santa clara, mmmm, delicioso.